Todo vale para mantener el espíritu bien alto y hacerlo llegar en máximo esplendor hasta el día en que se juegue la final de la Copa Libertadores. Boca Juniors y el hincha lo necesitan porque no será fácil jugar ese partido ya que si bien es una cancha neutral el rival es Fluminense, pero el Maracaná es su casa y el estadio salió sorteado para ser el escenario del gran partido. Así que necesita “agarrarse” de absolutamente todo para llegar lo más fortalecido posible al duelo contra los brasileños. Por eso, la victoria de Los Pumas se festejó en La Boca. Sí, aunque lo único que tienen en común los dos deportes es que son colectivos, ésta vez se unieron intensamente por una cuestión de enaltecimiento espiritual.
La cuestión viene así: hay dos datos. El primero, relacionado con el número siete. Hay varios ejemplos. Los hinchas de Boca descubrieron que la suma de los números 2023 (2 + 0 + 2 + 3) da como resultado siete, justamente la cantidad de trofeos que quiere levantar el "xeneize" en el "Maracaná". Además, en la revancha de la semifinal con Palmeiras, Edinson Cavani rompió su sequía goleadora y marcó el 1-0 a los 22.03 (la suma de estas unidades también da siete como resultado). Ahora, Los Pumas al vencer a Gales cortaron la racha de no llegar a semifinales de una Copa del Mundo desde 2007 año en el que el “xeneize” conquistó la Copa Libertadores por última vez de la mano de Miguel Ángel Russo. En dicho certamen, Argentina se quedó con el bronce del Mundial que tuvo sede en Francia.
Otro dato esperanzador para los simpatizantes de Boca que derivó del triunfazo ovalado es que siempre que Los Pumas llegaron a semifinales, un equipo argentino ganó el certamen continental de clubes de fútbol. En 2007 Argentina fue semifinalista en Francia y los de La Ribera fueron campeones, lo mismo pasó en 2015 cuando el Mundial de rugby se disputó en Reino Unido y River fue el campeón por eso la expectativa es buena para lo que pueda pasar el sábado 4, desde las 17, en Río de Janeiro.